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Este Blog está dedicado a mi padre, a su obra de vida, a sus ideas, pero por sobre todas las cosas a su constancia. Al académico, padre y abuelo.
Se agradecen los comentarios inteligentes, que aporten al debate intelectual, que complementen o contrasten los artículos publicados, desde una óptica de respeto por las ideas, incluso aquellas que no se comparten.

lunes, 24 de diciembre de 2018

ES CON EL MONO CON EL QUE HAY QUE JUGAR, NO SOLO CON LA CADENA



“Hay que invertir la pirámide. Pero solo con la propiedad estatal no lo vamos a lograr. Debe ser con una alianza, donde todas jueguen en sistema, dentro del modelo”

Esteban Morales Domínguez
UNEAC

La insistencia de nuestro Presidente, de que los Ministros y otros cuadros se presenten ante la televisión, den entrevistas, tengan Facebook y portales, es sumamente importante e inteligente. No solo para automatizar al gobierno. Sino también, modernizarlo, generando para el pueblo, respuestas efectivas y rápidas.
Es que se trata de un instrumento básico, para poder administrar bien al País. Es, además, para que todos los que lo administran, se vean obligados, siempre, a rendir cuentas ante los administrados.
De lo contrario, aunque el administrador sea buena persona, cuando este puede administrar sin rendir cuentas, se acostumbra a que puede hacer cuanto le parezca, sin tener que responder por nada ni ante nadie. Se malean. Se pueden corromper. Porqué por muy buenos que sean, pueden “algunos demonios atacarlos” y por ello, deben tener sobre si, siempre, los ojos atentos y la lengua amenazadora de los interesados.
Decía José Martí, que hay que ser bueno; pero que, para ser bueno, hay que ser prospero. Por lo que toda persona tiene derecho a buscar la prosperidad. Luego, vigilar que y como se hace para encontrar la prosperidad es importante. Sobre todo, para aquellos que la esperan y trabajan por ella afanosamente.
Por tanto, la primera responsabilidad de un cuadro administrativo estatal, es buscar la prosperidad para los demás, pero, lo que la suya propia, no puede salir sino de un entorno, que lo tiene que conminar, a la buena y honrada administración.
Entonces, esa intención marcada de nuestro Presidente, esa orden, de que los Ministros expliquen, informen y rindan cuentas, es condición indispensable, para que las cosas marchen bien. Sobre todo, respecto a poder borrar todo vestigio de corrupción en la administración estatal.
No podemos confundirnos. Corrupción, no es la acción de un trabajador, dirigida a la apropiación de lo que no le pertenece. Un simple trabajador, roba, pero no cuenta con que para corromperse. Por lo que, cuando se corrompe, lo hace siguiendo a un cuadro de dirección estatal, política o administrativa.
La corrupción viene de la delincuencial e irresponsable actitud de algunos administradores, que, apoyándose en su cargo, se apropian de lo que no les pertenece. Distorsionando el proceso de distribución de los bienes sociales. Y corrompiendo al resto de las estructuras, a trabajadores y a la sociedad toda.
Teniendo todas las posibilidades para hacerlo, porque por sus manos pasan los bienes del pueblo. Razón por la cual, cuando un trabajador se apropia de lo que no le pertenece, simplemente roba, no se corrompe, porque no cuenta con posibilidad de hacerlo. Se corrompe el que administra.
¿Por qué entre nosotros, la corrupción ha crecido tanto en los últimos años?
Las razones no son de tipo legal, policial, ignorancia, incultura, por voluntad malsana o interés malévolo. Para mí entender, las principales razones, que explican la corrupción, son de mala administración e insuficiente exigencia, hacia los cuadros estatales, que tienen bajo su responsabilidad la administración de los bienes públicos.
Desde el que atenido a su cargo se apropia de algo que no le pertenece; hasta el que, desde su posición administrativa estatal, multa monetariamente, o con favores a recibir, al que se ve obligado a realizar un trámite administrativo (cobrándole lo que la gente ha dado en llamar, “el acelerador”). Ambas situaciones, alimentan la corrupción, haciéndola crecer detenidamente. Porque es el propio aparato estatal, que nos debiera defender, el que la ejerce. Con todas las fuerzas que le concede el poder como respaldo.
Luego, nuestro Presidente está clarísimo. Con las medidas que ha planteado. Por qué el único modo de detener a esa lacra corruptora, es utilizando una tenaza cortante, de dos filos, que, en mi opinión, es la siguiente:
-La obligación de que los que administran, tengan que explicar lo que hacen, como lo hacen, por qué lo hacen y donde lo hacen.
-Que esa rendición de cuentas sea ante el pueblo. Utilizándose para ello, los medios de información pública. La televisión, la radio, la prensa escrita, los boletines de los organismos del estado y de las organizaciones., las artes, la música, todas, y a “Radio bemba”, qué como dijo un día el Cro. Raúl Castro, informa mejor que el ICRT. Se trata de hacer que el corrupto, caiga en la lengua de la gente del pueblo.
Para que el pueblo, pueda valorar la actuación de los administradores, criticarlos públicamente, con nombres y apellidos. Qué la prensa publique sus caras. Que las organizaciones políticas y de masas hablen de ellos; que estén en el mural del CDR; que un periodismo crítico, formal o informal, los persiga implacablemente.
Porque, a veces, no hemos siquiera conocido las caras de los que administran nuestros bienes. Recuerdo un manual de marxismo, dónde se decía, que el cuadro siempre debe estar como en un escenario. Es así, debemos ponerlos a todos, en un escenario.
Se trata de algo que no podemos soslayar, sí queremos solucionar el problema de la corrupción. La sociedad civil, defendiéndose, asimismo. Y si tiene un aliado, que le facilita los instrumentos para su defensa, mucho mejor.
Hagamos una encuesta y veremos como el pueblo tiene agudas opiniones de los Ministros aparecidos en la televisión recientemente.
Me arriesgo a entregarme como base material de estudio. Y si me equivoco, que me critiquen.
Comenzando por los cuadros que se presentaron a explicar las nuevas medidas del trabajo por cuenta propia. Resulta, que, para ellos, lo que había, era mucha gente confundida, mal informada, equivocadas, que no interpretaron lo que escucharon o leyeron, etc. No aceptaron, nunca, desde la propia Ministra, haberse equivocado; nunca dijeron, que algunas medidas eran extremas y absurdas. En su discurso, él equivocado siempre, resultaba ser el pueblo. Y para nadie es un secreto, que el primer equivocado, resulto ser el compañero Marino Murillo, que, en una sesión de la Asamblea Nacional, antes de que se informara nada sobre las nuevas medidas, que resultarían de la revisión que se estaba haciendo, lanzo la “bomba”, dé que se podría ejercer el TCP, con una sola licencia. Y resulta, que esa fue la primera medida que “se fue a bolinas”.
Del resto de los Ministros que hablaron, uno de los más criticados, fue el Ministro de Agricultura, que hablo de todo lo que había que hacer, sin ofrecer datos, ni medidas concretas. La Ministra de la Alimentación, fue un desastre, en especial, con el asunto del pan. Dentro de un momento crítico. Y en medio del cierto desabastecimiento, que ha caracterizado estos meses.
El Ministro de Transporte, estuvo de regular a mal. Mencionando soluciones que aún no se ven. Sin tratar a fondo y críticamente, el asunto de los taxistas. El de la Construcción no estuvo mal. Pero el único que quedo bien, a mi entender, fue el Ministro de Comercio Exterior e Inversión extranjera, Malmierca, que fue sólido, informativo y, sobre todo, crítico.
El Ministro de Economía, ha parecido fuerte, organizado, exigente, lucido y enérgico, pero hasta ahora, la política económica no se ha movido. Y considero que se necesitan medidas que la muevan. Creo que lo que estamos haciendo hasta ahora no nos ha hecho crecer. Ni lo hará, en los próximos años. Porque le restan algunas cosas por hacer.
“Creo que jugamos aun con la cadena, pero nos falta mover al mono”.
Pensamos, que se deben adoptar algunas medidas de política económica, que movilicen nuestras fuerzas productivas. Que están un poco estancadas.
Entre otras medidas, consideramos las siguientes:
-Fortalecer las prerrogativas de la llamada Empresa Socialista. Qué sean propiedad de los trabajadores de verdad. Qué bajo la vigilancia del estado la administren. --Qué se sientan dueños, con sentido de pertenencia, eligiendo al que los dirige. Rompiendo la incoherencia de llamarle empresa socialista a lo que no es. La propiedad estatal no es propiedad socialista.
- Que de verdad la empresa, pueda negociar el plan sino lo consideran viable; logrando un real sentido de pertenencia, ejerciendo iniciativas; distribuyendo salarios y premios, según crece la productividad, cumpliendo su encomienda social.
-Aligerar a la empresa de esa carga burocrática de una planificación, demasiado centralizada, que las ahoga.
-Creo que debe pensarse en como flexibilizar el monopolio del comercio exterior. Poniéndolo más a tono con la realidad actual. Para que el dinero acumulado no se gaste en pacotilla y bienes de otro tipo, sino en cosas, que nos hagan crecer económicamente.
-Mover la potencial inversión nacional, las PYMES; incluso vinculándolas a la inversión extranjera. Acabar de aceptar que, si el ciudadano común tiene dinero, lo pueda invertir, junto al estado o privadamente.
-Trazar una estrategia para que no se nos escape la fuerza calificada, que es nuestro principal capital nacional.
- ¿Qué hacer con esa gente de experiencia, jubilada, que aún puede trabajar? Incrementar sus ingresos y dar resultados al país.
-Por qué los profesionales, ¿no pueden ejercer también el trabajo privado?
-Acabar de darle un empujón al problema de la moneda y sus tasas. Que ya se han hecho muchas propuestas. Y no se maneja ninguna. Lo peor es no adoptar ninguna variante de solución y seguir arrastrando el problema.
-Creo que el centro del problema, de la insuficiencia de la política económica, es que aún no logramos sistematicidad, en la utilización de las diferentes formas de propiedad, que deben jugar en sistema con el modelo económico.
-Tomar medidas para acelerar la producción e industrialización agrícola. De modo que nos permita incrementar la oferta y bajar los precios de los alimentos, qué suben indetenidamente. Comprimiendo los salarios reales cada día más.
En realidad, no he escuchado todavía, al Ministro de economía, decir nada que nos saque del cierto estancamiento en que considero se encuentra la política económica. Presentando el plan del 2019, dentro de una política económica, que no se ha movido para garantizar un real y sostenido crecimiento del PIB.
No podemos conformarnos con no decrecer, y crecer un poquito el próximo año. Esa no es ninguna ventaja. Sobre, todo, políticamente hablando. ¿Hasta cuándo pensamos que la gente va a aguantar?
Son mis opiniones, no las he consensuado. Pero si están en varios artículos que he escrito.
Esto que ahora se está haciendo, con los Ministros, repite una experiencia, de hace algunos años, qué le costó el cargo, si mal no recuerdo, a dos Ministros al menos. Entonces, se cerró la experiencia.
Sin dudas, que repetir la experiencia será muy provechoso. Ya lo está siendo. El pueblo está contento con ella. Y al tanto de todo lo que se informa. Y ello está haciendo crecer la confianza en el Presidente, al que se le ve puesto para impulsar la solución de múltiples problemas.
Lamentablemente, nosotros no hemos tenido muchos cuadros que hayan dirigido, por años, dándole la cara al pueblo, ni rindiendo cuentas de lo que hacen. Solo Fidel, se exponía de manera permanente al escrutinio del pueblo. De tal modo que la gente decía, “esto anda mal, porqué Fidel no lo sabe”.
Recordamos, que tuvimos un Ministro de Alimentación, que robaba al pueblo, que entonces estaba pasando hambre. Es posible que ya haya terminado los años que le pusieron.
No dejemos solo al Presidente, que nos la ha puesto en las manos, para que nadie pueda robar más. Ni maltratarnos, como va siendo casi costumbre, cuando nos dirigimos a buscar la solución de algunos problemas a ciertas direcciones administrativas.
No obstante, no creamos que hasta aquí es todo.
Pues, falta algo. Las estructuras del Poder Popular, deben participar también, cumpliendo con las mismas reglas que ha puesto el Presidente. Porqué mucha gente habla de “Poder Popular sin poder”. O diciendo que “Qué el Poder Popular, no tiene poder”.
Vivo en el Cerro. Y no recuerdo que ningún cuadro del municipio, se haya presentado nunca, en una de nuestras Asambleas de Rendición de Cuentas, a responder por nada.
Considero, que los cuadros del poder popular, al igual que los ministros, también deben comenzar a presentarse en la televisión, informando sobre lo que hacen en sus municipios. Que es donde de verdad “se cuece nuestro ajiaco”. Para que la gente los oiga responder de los problemas, autocriticarse, decir como atienden los reclamos de sus delegados. Y también saber cuándo lo hacen bien.
Para esto no son necesarias campañas; no hacen falta, porque el pueblo podrá saber quiénes son los farsantes, los burócratas, los corruptos y quienes lo están haciendo bien.
Se me ocurre, que sería muy bueno, dedicar un canal de nuestra televisión dedicado a mirar hacia los municipios, y conminar a las televisiones provinciales, a que sigan el ejemplo de la Mesa Redonda.
Que lleven a rendir cuentas a los cuadros, principalmente, a los municipales. Pasarles revista a los municipios en todo el país, lo considero muy importante.
En realidad, sin temor a equivocarme, diríamos, que la nación es una “entelequia”, sino se mira hacia los municipios, dentro de ella. Los municipios, que son los nervios políticos y la carne del esqueleto. Es donde vive la gente del pueblo. No tenerlos en cuenta, sería como mirar hacia el bosque, olvidando auscultar los árboles.
Adelante Presidente, el escrutinio que Ud. Hace a los ministros, debe ser también con los cuadros del poder popular. A todos los niveles, no solo a nivel nacional.
Vera Ud. como se va a enterar de cosas, sin tener que dar esas caminatas, tan extenuantes.
La Mesa Redonda, entonces, tendrá mucho trabajo; más que antes, que se dedicaba a “mirar solo del malecón para afuera”. Qué se dediquen también a “mirar del malecón para adentro”, que lo están haciendo bien. Hay mucho que hacer en ese escenario. Sobre todo, en La Habana, aunque no únicamente.



Diciembre 21 del 2018.



martes, 11 de diciembre de 2018

¿Y DESPUES DE LAS NUEVAS MEDIDAS SOBRE EL CUENTAPROPISMO QUE VIENE?

Esteban Morales Domínguez
UNEAC

Se dijo que, con las medidas de rectificación recientes sobre el trabajo por cuenta propia(TCP), la idea es continuar, pero en realidad, apenas se ha comenzado; restan algunas cosas muy importantes.
De lo que se viene insistiendo y hablando, es de promover el desarrollo de las fuerzas productivas. Es decir, de hacer avanzar la relación dialéctica entre los medios de producción y la fuerza de trabajo y esas son palabras mayores. El país no puede quedarse en el llamado cuentapropismo, pues nos amenaza el peligro de retroceder.
Las medidas adoptadas ahora con el trabajo por cuenta propia solo tocan la actividad comercial, productiva, de servicios menores y el empleo que se le asocian. Lo cual representa un avance, sin dudas, porque algunas de las medidas que entraban en vigor hoy, (7 de diciembre) parecían de locos, con el mayor respeto para los que las adoptaron.
Pero aun dentro de las propias medidas que se anunciaron, ¿Por qué se mantienen ahora dos cuotas de adelanto en el banco? ¿Es eso realmente necesario? Bastaría con que todas las operaciones a realizar se tuviesen que hacer por los medios bancarios que existen y no obligar a los cuentapropistas a tener parte de su dinero congelado en una cuenta bancaria y además, hacer más eficiente el cobro de los impuestos. Púes lo que se les exige ahora, más bien parece una medida de desconfianza o para controlarles algo que solo a ellos pertenece. Que hagan con su dinero lo que deseen, pero que paguen los impuestos y cuando los incumplan, que los multen.
Si se fuera más eficientes en el cobro de los impuestos y se vieran obligados a utilizar el banco para cualquier operación que fuesen a realizar, ¿para qué se necesitan mantener en el banco las ahora 2 cuotas adelantadas?
Pero si de verdad lo que se quiere es desatar las fuerzas productivas, faltan medidas aún más importantes, que seguir dándole vueltas a la noria con el TCP.
Sin embargo, parece existir cierta incapacidad pragmática y una falta de visión de largo plazo, que se ha impregnado como una cultura política socialista. Un cierto rechazo visceral a la asimilación de los disensos, cierta ineptitud para metabolizar en políticas, el pensamiento científico social, o todo eso y tal vez mucho más.
Se trata de una filosofía del socialismo que no se corresponde con la comprensión profunda de los fracasos reales, sus causas y el valor de la búsqueda de alternativas, qué tanto se necesitan.
Dar respuestas informadas, no es simplemente el resultado de un acto de voluntad de los decisores, sino algo que requiere también la asimilación de un cambio radical de mirada sobre la realidad económica actual en que vivimos, que ya casi se asemeja a las dificultades del llamado periodo especial. Por lo que no es casual, que mucha gente, esté pensando que hemos comenzado a vivir un periodo similar.
Fidel nos dejó para ello la definición provocadora del concepto de revolución, como expresión más acabada y verdadero colofón de la visión que inauguró primeramente en su discurso a los intelectuales de 1961, al cual todo el mundo se refiere, aunque no parece que todo el mundo comprende.
El trabajo por cuenta propia en particular, es algo que no acaba de ser aceptado por la clase política, engranado en el sistema económico integral, que supone un diseño socialista viable. Lo cual resulta una gran preocupación para todos los implicados en la actividad.
Por lo que se hace difícil que el gobierno de respuestas directas y claras, que son de política económica sobre el TCP, si en las instituciones del estado prevalece marcada resistencia a un verdadero redimensionamiento estructural de la propiedad y la gestión.
Aunque en el TCP, se acaba de producir un paso de avance, quedan aún asuntos por solucionar, que van mucho más allá y que son de la naturaleza siguiente:
  1. Hace falta que la empresa deje de ser estatal y sea de verdad socialista. Para eso, es necesario que tenga las mayores prerrogativas posibles, lo que significa liberarlas de un sistema de planificación excesivamente centralizado, que las ahoga, les corta mucha iniciativa, les mantiene la presión burocrática y no deja que sean los propios trabajadores los que la dirijan. Propiedad estatal no es propiedad socialista. Propiedad socialista, es propiedad de los trabajadores, interesados y estimulados a producir, comportándose como dueños y con sentido de pertenencia.
  2. Hace falta liberar la posibilidad de que los cubanos puedan invertir, incluso, asociándose con el capital extranjero. Pues hay mucho dinero inmovilizado que pudiera producir, generar empleo y riqueza. ¿Seremos el único país que inmoviliza el dinero, por miedo a que la gente se enriquezca, cuando en realidad, la lucha debe ser contra la pobreza, que lamentablemente ha crecido?
  3. Hace falta reconocer jurídicamente a la mediana y pequeña empresa, también al llamado cuentapropista, que en muchos casos, no es más que un eufemismo. Allanar el camino al cooperativismo, empujándolo, pues aún no ha generado ni cercano a lo que puede dar.
¿Por qué un campesino que tiene dinero, en lugar de gastarlo en “pacotilla”, no puede importar un tractor o una maquinaria para industrializar su producción? Ello generaría más empleo, más producción y contribuiría a bajar el precio de los alimentos, que se incrementan continuamente. De lo contrario, ¿Se pretende industrializar la producción agrícola, como estamos cansados de ver, llenando laticas a mano?
  1. ¿Por qué no puede haber productores de ganado menor, o mayor, que cuenten con las facilidades para incrementar su producción? También industrializarla. Lo cual evitaría que una libra de puerco o de carnero valga 50 pesos. Y que la carne de vacuno, sólo sea consumible en los restaurantes.
  2. Hace falta para todo ello, hacerle aunque sea un pequeño hueco, al monopolio del comercio exterior. Monopolio que ya no se corresponde con la etapa económica que estamos viviendo.
  3. Además de todas las medidas antes propuestas, hace falta darles, aunque sea un pellizco, a la moneda y sus tasas de cambio. ¿A qué se espera? Si estamos más que conscientes del daño que nos hace.
  4. La existencia del mercado al por mayor no depende de que desde arriba alguien lo cree, sino de una escala de la relación mercantil que imponga un hito en la formación de los precios. Entonces, más que crear un mercado mayorista, de lo que se trata es de hacerle espacio al mercado, a las relaciones mercantiles, dentro de un sistema, para que forme un eslabón mayorista debidamente.
  5. El tema del debate económico carece de repercusión en nuestra prensa escrita, radial y televisiva y en los discursos políticos. Aunque a ello se agrega el triunfalismo y la falta de objetividad con que a veces se divulgan los temas de la economía.
Todo lo aquí expuesto representaría mayor empleo, más producciones y potenciales rebajas de los precios. Es eso a lo que le llamamos desatar las fuerzas productivas. Es decir, utilizar todas las potencialidades que existen para que la economía logre crecer y desarrollarse.
Fíjense que no estoy pensando en las inversiones extranjeras. Pues esas llegaran algún día, en la magnitud en que las necesitamos. Ahora, la prioridad es salir del hoyo en que estamos. Para lo cual no tenemos mucho tiempo.
Porque me parece que la gente no puede esperar más. Es la variable política, de la que tanto hemos hablado.
¿Lograremos con medidas como las expuestas entrar en el capitalismo?Que en nuestra opinión, es el temor que nos está paralizando.
Creo que no. Pero si seguimos como vamos, podemos caer exhaustos en los brazos del capitalismo y no en el de Suecia, sino en el que nos corresponde como país pobre y subdesarrollado, lo que ocurrirá si el país no se mueve rápidamente hacia adelante. Pues no es posible continuar con un crecimiento tan magro del PIB, como el que se ha alcanzado en los últimos años y el que nos espera en el 2019.

Diciembre 7 del 2018.